Chimbote en Línea (Por: Luis Poma Henostroza).- El periodismo chimbotano está de duelo, Víctor Rodríguez Paz ha fallecido. Los detalles de su partida no son relevantes frente a lo que en su caminar nos dejó este hombre culto y de claras convicciones sociales.

El "Gato", llamado así entre amigos, forma parte de la historia del periodismo chimbotano no sólo por haber desempeñado las corresponsalías de importantes periódicos como El Nacional, El Observador, La Prensa, La Industria y La República, sino porque desde El Tiempo de Chimbote, diario que fundó en 1992, plasmó una propuesta informativa basada en la honestidad, decencia y posición clara frente a la coyuntura.

El caso de los campesinos desaparecidos de Santa, las detenciones arbitrarias de ecologistas, el despido masivo de empleados públicos, la degradación de la política, la privatización de las empresas públicas, la firma del TLC con EEUU en desmedro del agro nacional, eran temas predilectos en la portada del tabloide azulino y negro bajo su dirección.

Eran tiempos de dictadura y la maquinaria fujimorista no toleraba su periodismo militante, por eso una y otra vez trató de asfixiarlo vetándolo en la publicidad, sea estatal o privada, y aún así el buen Gato siguió firme en su quijotesca batalla.

La sala de redacción de El Tiempo de Chimbote, instalada en un segundo piso en la sétima cuadra del jirón Manuel Ruiz, fue su laboratorio para demostrar que puede ejercerse el periodismo con dignidad, no importaba que faltara papel, tinta o capital, allí estaba un equipo humano con convicciones capaz de remontar cualquier situación. Toda una escuela de tenacidad.

Los casi cuatro años que trabajé junto a él, primero como redactor y luego como editor, me sirvieron para crecer en la profesión y valorarlo como jefe, amigo y compañero. A veces no coincidíamos en los puntos de vista, nos enfrascábamos en discusiones pero al final siempre dejaba que primara el criterio democrático y no necesariemente el suyo.

Ahora que su voz se apagó y el diario en donde cobijó a entrañables colegas  ya no está en circulación, queda el recuerdo del gran equipo que junto a él se atrevió a practicar un periodismo libre y honesto.

Al rendirle homenaje a Víctor, rindo también honores a quienes ya no están entre nosotros y formaron parte de este equipo: Fernando Montenegro Centurión, Alejandro (Alex) Torrejón Casana, Víctor Hugo Villanueva y Armando Ramos Carbajal.