Chimbotenlinea.com (Por Milton Palpa).- Esta mañana el ciudadano Máximo Neyra Valderrama, junto a su abogado, llegó hasta la Plaza de Armas para dar a conocer ante los medios de comunicación la estafa que le hicieron, señalando que entregó el título de propiedad de su casa a un supuesto amigo, para acceder a un préstamo bancario el cual nunca recibió; incluso falsificaron su firma ante un notario para acceder a ese dinero.

(Foto Milton Palpa)

Pese a todos los esfuerzos que hizo durante 13 años , el ciudadano que hoy trabaja como taxista, se encuentra a punto de perder su vivienda que será rematada por el banco dentro de un par de semanas.

Según nos cuenta este problema se presentó en el año 1996, cuando su supuesto amigo, propietario identificado como Moisés Odar Saavedra solicitó un crédito hipotecario en el Banco Wiesse por el monto de 25 mil 400 dólares, utilizando el título de propiedad del denunciante quien se  lo proporcionó como garantía de un posible préstamo que le iba a hacer,  para abrir un local ferretero  del cual sería propietario, lo que jamás se concretó.

"Estoy destruido, pues ante este problema mi familia se disolvió. Estaba ilusionado con  tener mi empresa. Por ello la deuda que iba a contraer era de 3 mil 500 dólares, pero no me llegó a dar el dinero, en cambio yo si le di el título de mi casa y él se valió de eso para sacar su préstamo hipotecario. Pero eso no fue todo, ya que no sólo me utilizó a mi si no que estafó a 4 personas más, 3 de ellos ya perdieron sus inmuebles, por ello estoy en una situación desesperante mi casa ya la rematan", sostuvo con la mirada apenada.

FALLOS ILÓGICOS

El denunciante, domicilia en el pueblo joven La Victoria, y manifestó que apenas se enteró de esta situación denunció al estafador a quien le salió una sentencia por cuatro años más una reparación civil que nunca vio, ya que en primera instancia se anularon la escritura pública donde hubieron documentos en los que falsificaron su firma, pero no  anularon la garantía hipotecaría.

Informó que después de tantos procesos judiciales, gastando dinero en abogados, nada ha servido porque se encuentra a punto de perder su vivienda, y todo por la viveza de un sujeto que teniendo el título de propiedad falsificó su firma , para luego presentar estos documentos en otras instituciones bancarias

“Este terreno lo compré en el año 1974 y poco a poco lo fui construyendo, estoy asustado porque no tengo a donde ir, a pesar de que he luchado tantos años nada se encuentra a mi favor, sólo espero que la resolución no salga en mi contra, por lo tanto seguiré luchando hasta que Dios me quite las fuerzas”, concluyó