Chimbote en Línea (Cuestión de Fe).- En el Ángelus del último domingo del año, fiesta de la Sagrada Familia, Francisco reflexionó sobre el paralelismo que hay entre los miles de refugiados que se ven obligados a abandonar su país y la huida a Egipto de Jesús, María y José.

PAPA FRANCISCO
"Casi todos los días la televisión y los periódicos dan noticias de prófugos que huyen del hambre, de la guerra, de otros peligros graves, en busca de seguridad y de una vida digna para ellos y sus familias”.

2000 años después los cristianos no dejan de recordar el momento en el que la Sagrada Familia emigró. Por eso el Papa pidió pensar más en las familias que en nuestros días deben tomar decisiones parecidas.

Francisco dijo si Jesús eligió nacer en una familia de refugiados fue para mostrar que Dios quiere a todos. Por otro lado pidió que se cuide de otro tipo de exiliados: los que la propia familia margina.

PAPA FRANCISCO
"Pensamos también en los exiliados. Yo los llamaría exiliados ocultos que pueden estar dentro de una misma familia: los ancianos, por ejemplo, que a veces se les ve como una carga”.

El Papa pidió a las familias que recuerden la importancia que tienen dentro de la Iglesia como primeros evangelizadores. Francisco les enseñó tres palabras clave para tener una vida pacífica y feliz.

PAPA FRANCISCO
"Cuando en una familia no se invade y se pide permiso. Cuando en una familia no se es egoísta y se enseña a decir 'gracias'. Cuando en una familia uno reconoce que ha hecho una cosa mal y pide perdón. En esa familia hay paz y alegría”.

Antes de despedirse de la multitud que acudió a la plaza de San Pedro, Francisco recitó una oración especial dedicada a la Sagrada Familia. Pidió su intercesión para la buena marcha del Sínodo de Obispos cuya primera etapa será después de verano y que estará centrado en la familia.

ORACIÓN DEL PAPA FRANCISCO A LA SAGRADA FAMILIA:  

«Jesús, María y José,
en ustedes contemplamos
el esplendor del amor verdadero,
a ustedes nos dirigimos con confianza.

Sagrada Familia de Nazaret,
haz que también nuestras familias
sean lugares de comunión y cenáculos de oración,
auténticas escuelas del Evangelio
y pequeñas Iglesias domésticas.

Sagrada Familia de Nazaret,
que nunca más en las familias se vivan experiencias
de violencia, cerrazón y división:
que todo el que haya sido herido o escandalizado
conozca pronto el consuelo y la sanación.

Sagrada Familia de Nazaret,
que el próximo Sínodo de los Obispos
pueda despertar en todos la conciencia
del carácter sagrado e inviolable de la familia,
su belleza en el proyecto de Dios.

Jesús, María y José,
escuchen y atiendan nuestra súplica.
Amén. (Fuente: Romereports)