Chimbote en Línea.- El color y sabor del maracuyá lo han convertido en uno de los frutos tropicales preferidos para jugos, refrescos y batidos. Además, suele ser recomendado en una dieta variada y balanceada, por su aporte de vitaminas y minerales.

Así lo informa el equipo técnico de la Unidad Territorial Áncash 2 del Programa Nacional de Alimentación Escolar Qali Warma, quienes destacan el contenido de vitamina C, fósforo y calcio en cada 100 gramos de jugo puro de este alimento: 22 mg, 30 mg y 13 mg, respectivamente.

Estos micronutrientes, así como los que están presentes en otras frutas y verduras, son considerados esenciales en una alimentación saludable, con el fin de mejorar la salud general y reducir el riesgo de algunas enfermedades no transmisibles, como las cardiopatías y ciertos tipos de cáncer. Por ello, la Organización Mundial de la Salud recomienda el consumo de más de 400 gramos de frutas y verduras al día en dietas bajas en grasas, azúcares y sal (o sodio).

En la región Áncash, el valle del Santa cuenta con 35 000 hectáreas de sembríos de maracuyá y una producción anual de 70 000 toneladas. Esta zona también ha sido conquistada, como otras de América, por su sabor agridulce y su aroma intenso.

Este fruto puede ser utilizado no solo en bebidas refrescantes, sino también en postres y mates calientes. Incluso, puede ser el compañero perfecto para la hojuela de avena, que distribuye el programa Qali Warma y que preparan las madres de familia para los desayunos de sus hijas e hijos estudiantes.