Se hicieron pasar como vendedores de queso para reducir a vigilantes y robarse valiosa información

La sede central de la Fiscalía Anticorrupción del Distrito Judicial del Santa ha sido blanco de la delincuencia. Dos malhechores se hicieron pasar como humildes vendedores de queso para tomar por asalto este local ubicado en pleno casco urbano de Chimbote.

(Foto Archivo)

Dos fiscales y un grupo especializado de la Policía han iniciado las investigaciones de este atentado contra la fiscalía. Y desde esta mañana los magistrados Anticorrupción han empezado a realizar un inventario de las carpetas fiscales y toda la documentación que tienen en sus despachos para determinar qué información se llevaron estos avezados delincuentes.

La fiscal superior Nancy Moreno Rivera, titular de la Fiscalía Anticorrupción, fue la encargada de poner en conocimiento de este escandaloso robo a los magistrados de esta sede.

El martes los reunió y les informó del atentado que ocurrió la noche del 11 de setiembre pasado y que increíblemente no fue denunciado por los tres vigilantes de turno, sino fue otro agente de seguridad quien contó a la fiscal Nancy Moreno lo que había ocurrido.

Los tres vigilantes de turno estaban mirando el partido de fútbol por las eliminatorias mundialistas entre Perú y Argentina, eran cerca de las 9 de la noche, cuando de pronto se acercó a la puerta de la fiscalía un delincuente que se hacía pasar como un humilde vendedor de queso.

Este hampón llamó a la puerta y dijo que traía queso de Cabana. Uno de los vigilantes abrió la puerta y de inmediato fue encañonado por otro hampón que estaba escondido a un costado de la pared.

Los vigilantes fueron encañonados y reducidos en el primer piso de la fiscalía, mientras que los delincuentes ingresaron a las oficinas de los magistrados Anticorrupción. Tras haberse apoderado de valiosa información fugaron en una camioneta color negra.

Otra más

El otro escándalo ocurrió el lunes 8 de octubre, feriado. Ese día los vigilantes permitieron el ingreso de una persona particular para arreglar la computadora de mesa de partes, pero nadie comunicó a la fiscal superior Nancy Moreno de lo que se había realizado. (Por: Unidad de Investigación)