Chimbote en Línea (Anticorrupción) Quien causó gran expectativa en los asistentes de la audienca pública anticorrupción realizadea hoy en Chimbote,  fue Fiorela Nolasco Blas. En su alocución de apenas 3 minutos, recordó a las autoridades nacionales el calvario que vive su familia desde el 2010, cuando su fallecido padre, Ezequiel Nolasco Campos se opuso a   icitar un paquete de obras de 800 millones de soles a través de la OEI.

“Fue en ese año cuando irrumpieron mi casa buscando a mi padre, pero mataron a mi hermano. Desde ese momento a pesar de estar hospitalizado, mi papá recibía amenazas de muerte y el siempre sindicaba a “Goro”. Pidió garantías para su vida, pero el coronel Aguilar Amaro, jamás lo recibió. Y fue peor porque en el Poder Judicial todo ese tiempo cambiaban jueces y fiscales”, expresó.

Fiorela Nolasco, recordó que su papá, Ezequiel Nolasco, responsabilizó al alcalde provincial Luis Arroyo Rojas, como el autor intelectual del crimen de su hermano (Roberto Torres), por las pruebas que había accedido, donde el burgomaestre previó al asesinato, se comunicó en reiteradas veces con los delincuentes implicados.

La joven, que reclama justicia, refirió que durante las investigaciones Luis Arroyo Rojas tuvo orden de detención, pero no se le exigió, porque repentinamente el hoy presidente de la Corte Superior de Justicia del Santa, Sánchez Melgarejo, solicitó 5 días de vacaciones.

“¿Dónde estaba el señor Dante Farro en ese momento. Si en su cargo hubiese estado la doctora Nancy Moreno,  a quien la respeto, no hubiesen matado a mi padre”, anotó.

Recordó que el 10 de octubre del 2012, Ezequiel Nolasco Campos fue a brindar su declaración ante la Fiscalía de Lima, acompañado de la fiscal Jenny Vilcapoma sobre el caso La Centralita. En ese momento dijo lo llamaron por teléfono y con amenazas les pidieron que abandonen ese lugar, porque de lo contrario los iban a matar.

Pidió a las autoridades presentes en la audiencia descentralizada de la Comisión de Fiscalización del Congreso de la República, que investiguen el Poder judicial, el Ministerio Público y la Policía Nacional. (Texto y foto: Milton Palpa)