Víctima exhorta a jueces sancionar ejemplarmente a docente de UNS


Chimbotenlinea.com (Por Cintia Cabrera).- “Yo me siento muy sorprendida con los resultados y la actitud de los magistrados, respeto la decisión que han tomado las autoridades para esto, pero sí hago un llamado a los jueces que tienen que ver con el caso porque no es sencillo. Es una persona que estuvo manejando en completo estado de ebriedad, con 1.86 gramos de alcohol en la sangre y él mismo confesó a la Policía que la noche del accidente bebió 6 botellas de cerveza con 4 vasos de whisky, entonces todo está muy claro”, sostuvo Susana Rebaza Alvarado.

(Foto Cintia Cabrera)

Susana es aquella joven de 35 años, que lleva postrada mes y medio en cama, inmóvil e imposibilitada de ejercer cualquier actividad como toda joven profesional,  cuyo presente fue truncado por un catedrático irresponsable de la UNS, Miguel Ponce Loza, quien la atropelló cuando manejaba su moderno auto en completo estado de ebriedad, dejándola con la pelvis fracturada y sin poder moverse.

Por fortuna, Susana Rebaza, es una trabajadora administrativa nombrada en el Poder Judicial, ella cuenta que permanece en cama casi 45 días y aún falta completar los 2 meses de reposo absoluto recomendado por el médico como requisito indispensable para lograr la soldadura de los huesos fracturados y proseguir con el tratamiento posterior.

Su delicado estado de salud es a raíz del aparatoso accidente del cual fue víctima junto a su compañero, el pastor Héctor Baltasar Alfaro, cuando Ponce Loza, director de la Escuela de Post Grado de la Universidad Nacional del Santa, perdió el control de su camioneta por el   el pasado 18 de abril en el óvalo La Familia y los atropelló.

“Imagínense que le toque vivir esto a sus hijos. Eso es lo que yo no entiendo. Porque eso es lo que pudo suceder a sus hijos si hubieran estado jugando en el mismo parque y viene un loco borracho y los atropella. Entonces, ¿Qué dice la sociedad ante este hecho? Toda la urbanización está consternada con todo ello porque mañana más tarde no se sabe a quién le va a tocar ser víctima y el gran responsable sale en libertad”, responde indignada y absorta con la decisión de los magistrados, cuyo fundamento se desconoce.

Se dice que la apelación del docente se fundamenta en que se acoge a la confesión sincera, cuando en las entrevistas preliminares negó mantener algún antecedente legal cuando eso se contrapone con la realidad porque fue denunciado por una pensión de alimentos.

“Yo considero que los magistrados no deben ser benevolentes sino que deben dar una sanción ejemplar porque la sanción que se da es con el ánimo de cambiar a las personas, que amerite conducta restaurada en la persona. Si le aplico una sanción benévola como en este caso, mañana más tarde lo que va a incentivar es que salgan manejen tomen como les da la gana y de aquí a un mes salga libre. Tan benévola va ser la autoridad de soltar a una persona”, concluyó la agraviada.

En el campus universitario, docentes y alumnos se muestran incomodos con este hecho  y con la posible reincorporación de Ponce Loza a sus labores académicas y presuntamente en el mismo cargo. Al respecto, la Federación Universitaria evalúa emitir un comunicado sobre este caso, ya que rechazan que retorne al puesto como director de la Escuela de Postgrado.