Comisión del Congreso citará a familiares de víctimas de la violencia políticas en Áncash

Chimbote en Línea (Andina)  La comisión del Congreso de la República que investiga las denuncias contra el presidente regional de Áncash, César Álvarez, tendrá como primeros invitados a los familiares de las ocho víctimas asesinadas en esa región presuntamente por motivaciones políticas, informó el presidente de este grupo de trabajo, Mesías Guevara.

Adelantó que en la sesión de hoy martes, la comisión investigadora debe establecer el orden de las invitaciones para las siguientes semanas, así como los pedidos de información que se presentarán a diversas instituciones del Estado.

"Es importante el testimonio de los familiares porque nos permite conocer de primera mano las denuncias que hicieron estos dirigentes y las amenazas que recibían", afirmó en declaraciones a la Agencia Andina.

Refirió que se solicitará información de este caso al Ministerio Público, a la Procuraduría Anticorrupción, a la Contraloría, al Consejo Nacional de la Magistratura y al Ministerio de Economía y Finanzas sobre todo lo actuado con respecto a Áncash.

Igualmente, informó que el congresista Heriberto Benitez, al que se le acusa de haber interferido para entorpecer las investigaciones en el caso denominado "La centralita", será citado en las próximas semanas

Resta definir si Benítez será citado como denunciado o testigo, aunque recordó que el propio legislador ha solicitado ser incluido en las investigaciones.

Asimismo, el titular de la comisión respaldó que el Poder Judicial haya dictado orden de impedimento de salida del país para Álvarez, así como el congelamiento de las cuentas de la región Áncash, como medidas preventivas.

En ambos casos, dijo, se trata de acciones plenamente justificadas que favorecerán el desarrollo de las investigaciones en curso.

Álvarez ha sido sindicado como presunto autor intelectual de los asesinatos de opositores a su gestión, así como de delitos de corrupción y malos manejos al interior del gobierno regional.

El imputado ha negado los cargos y atribuye las acusaciones a una venganza política y a intentos por apartarlo de la contienda electoral.

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