Chimbote en Línea (Periodismo escolar) Hace unos días encendí mi televisor como de costumbre en la mañana, era más temprano de lo usual y al darme cuenta que mi noticiero habitual aún no había comenzado decidí buscar otro mientras comenzaba. Pasando de canal en canal me percaté de algo que me confundió mucho, en lugar de dar las noticias del día me topé con una cobertura de 20 minutos acerca de noticias faranduleras y un resumen excesivamente largo acerca de lo que acontecía en la vida de personajes del reality show que producía la misma cadena de televisión.

Aquí es donde me puse a pensar hasta qué punto ha calado el morbo de los ciudadanos para que nos tengan que llenar la vista permanentemente, con titulares amarillistas y escándalos privados que se usan como la diversión de un país que está siendo adormecido frente a la realidad que vive.

Cuando en el segundo gobierno de Alberto Fujimori se limitó la libertad de prensa las críticas no se hicieron esperar, porque estaban robando el privilegio de la información a las masas. Sin embargo años después se ha creado una nueva técnica para dopar y dormir al país frente a las injusticias,  que ya ni atención genera. No es un tema nuevo y mucho menos reciente, pero sí permanente en una sociedad que se embrutece día con día, el control de los medio de comunicación tiene un efecto directo en el comportamiento de los ciudadanos.

Pero el problema no radica en las grandes cadenas de televisión o en quien esté manipulando las masas informativas, el problema real es la falta de cultura y la forma en la que dejamos que el morbo cale en nuestra sociedad, para imponerse como un narcótico que nos hace ver el menor de los males.
Es inmoral e ilícito discernir si un programa televisivo es bueno o malo, pero es posible y más que necesario determinar hasta qué punto puede llegar a influir en la conducta de los ciudadanos.

En los últimos cinco años la cobertura a los espectáculos ha ido creciendo masivamente ¿Cuánto más, nos dejaremos dopar, frente a una realidad que pide a gritos la atención de sus compatriotas?

La responsabilidad de estar informados es a su vez un privilegio y depende exclusivamente de nosotros mantenerlo, busquemos informarnos de fuentes confiables y no estar  cegados, aún más, por el morbo y el escándalo. Seamos personas cultas con una amplia capacidad de crítica y bienestar social.

Alumna: Chero Vergaray Rosmery                                                                                                             
Grado: 5to                                                                                                                                                   
Colegio: I.E.P.P. MUNDO MEJOR                                                                                                         
Profesor asesor: Juan Miguel Paredes Arana