Más salud a un precio justo: la industria farmacéutica en el Perú

Chimbote en Línea (Periodismo escolar) En el Perú y el mundo, la industria farmacéutica es la más poderosa y rica, después de la industria de fabricación de armas que ganan miles de millones; una, para matar a la gente; y la otra, se supone, para salvar de las enfermedades.

Hoy, en Chimbote, estamos llenos de farmacias y boticas; en el perímetro de la Plaza de Armas encontramos hasta seis farmacias.
Hace tiempo, la Ley prohibía instalar una botica a menos de 200 metros, una de la otra.

La más conocida era la del químico señor Terrase, en la segunda cuadra del jirón Manuel Ruíz, que después pasó a llamarse Farmacia Bazán. En la avenida Bolognesi, segunda cuadra, la Botica Chimbote de don Domingo Farro; y en la cuarta cuadra, la Botica del señor Ismael Pomar Iturrino, un ciudadano chileno.

Antes, los médicos no recetaban medicinas, porque no se fabricaban, extendían una “Receta” donde indicaban al farmacéutico o boticario, una lista de ingredientes y en qué cantidad, para preparar: jarabes, pomadas, ungüentos, frotaciones, tónicos, etc., ellos eran quienes las preparaban.

Hoy, las empresas transnacionales, sobre todo las chilenas, han invadido el Perú y tienen grandes monopolios que fabrican sus propios productos de marca.

Las medicinas en el Perú son más caras que en los países vecinos, sobre todo en los productos para combatir el cáncer o el SIDA, llegando a ser en algunos casos hasta 1000% más caras en comparación a los precios de otros países.

Hay dos tipos de productos farmacéuticos: Los de marca; es decir, las de laboratorio reconocido y los genéricos; es decir, las medicinas que brinda el Ministerio de Salud (Minsa). Los primeros los fabrican las empresas transnacionales y son más caras porque hacen propaganda para su venta, envases bonitos y demás. Los genéricos llevan como nombre el del producto químico que la genera y tienen el mismo efecto, pero la diferencia de precios es enorme entre una y otra.

Hay algunos detractores y defensores, de estos productos; pero la verdad, es que los monopolios son los que dirigen estas campañas. El Gobierno ha obligado que las farmacias también vendan estos productos. Pero cuando tú vas a comprar, primero te ofrecen el producto de marca. Amigo consumidos, debes exigir el medicamento genérico. Por ejemplo, una pastilla contra la alergia cuesta S/. 0.10 céntimos y la de “marca” S/. 2.70, sin embargo, tienen el mismo efecto. Por lo tanto, debes cuidar tu bolsillo.

El Gobierno ha creado la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid) que tienen farmacias institucionales del Ministerio de Salud, para la venta exclusiva de medicinas genéricas. En Chimbote, funciona en la avenida Pardo, tercera cuadra.

El Gobierno debería exigir a las transnacionales que rebajen los precios como lo hacen otros países en defensa de la salud y economía de su pueblo.

ESTUDIANTE: NATALIA EFFIO ROBLES
GRADO: III AÑO DE SECUNDARIA
COLAGIO: “I.E.P.P. SANTA ROSA DE LIMA”
ASESORA: Prof. PAOLA ROSALES LÓPEZ
 

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