Golpeó a sus dos menores hijos porque no le quisieron dar cerveza
Chimbotenlinea.com (Por: Cintia Cabrera).- La subgerente de la Defensoría de la Mujer, Niño y adolescente (Demuna), Rocío Murriel Cabezudo, condenó la decisión del fiscal de turno quien dejó en libertad a Juan Carlos Montesa Obando (42) quien agredió salvajemente con una madera en el rostro a su hija de 12 años de edad. Peor aún, el agresor convive bajo el mismo techo con sus víctimas.
(Foto Cintia Cabrera)
Murriel Cabezudo informó que ayer acudió a la vivienda de la familia ubicada en la urbanización Nicolás Garatea, pero nadie quiso atenderla.
“He tocado la puerta y nadie salía, nadie ha querido atendernos creo que se atemorizaron porque vieron la camioneta de serenazgo. No han querido hablar con nadie”, manifestó.
Ante tal negativa, la licenciada Murriel Cabezudo dijo que se reunirá con el representante de la fiscalía quien dispuso dejar al acusado en libertad a fin de conocer los pormenores ya que la falta fue cometida en delito flagrante, y además ambos menores acusaron a su padre.
“Es indignante esta situación que el sujeto quede en libertad, después de haber pegado a sus hijos sólo porque no le querían dar cerveza. Sus hijos han estado, uno de ellos herido y el otro nervioso. Se debió dar una sanción porque además una agravante la persona agredida es una menor de edad”, agregó.
Se conoce que una de las causas para ordenar su libertad es la ausencia de una denuncia en contra del acusado. La madre de los niños se resistió a realizar esta diligencia; pero - al constituirse un delito de flagrancia y de violencia hacia la integridad de un menor – dijo la jefa de la Demuna, “debe entrar a tallar las funciones de las autoridades en este caso la Fiscalía y la Demuna, por eso vamos a solicitar se nos informe el porqué del fallo”, expresó.
La Demuna promueve en la Semana Nacional de los Derechos del Niño, la preservación y garantía en el seno materno de inculcar estos valores; pero en algunos casos las madres se resisten a denunciar a sus cónyuges. En ese sentido, la Demuna se ofrece como un ente orientador en charlas psicológicas tanto para la víctima como el atacante.