Chimbotenlinea.com (www.obispadodechimbote.org).-Como en años anteriores, la ciudad de Chimbote celebra su fiesta patronal en honor a San Pedrito.Son muchos los motivos que tenemos para estar agradecidos con Dios, pero sobre todo el tener como protector de nuestro puerto a aquel a quien Cristo distinguió con su amistad y cercanía.
San Pedro es una especie de radiografía de lo que es cada uno de nosotros: valiente y cobarde, arrogante y humilde, capaz de claudicar pero también dispuesto siempre al arrepentimiento. Cómo nos sentimos retratados en él.
A lo largo de estos años hemos venido reclamando que esta fiesta patronal sea principalmente una fiesta religiosa.
Sin duda alguna, que en torno a lo fundamental aparecen otras actividades legítimas: el comercio, los espectáculos, el deporte, todo aquello que convierte a la última semana de junio en una catarsis que nos devuelve la alegría y la esperanza.
Que seamos capaces de desterrar la violencia, la indiferencia, y tantas cosas más que trivializan la fiesta y convierten a San Pedrito en un mero pretexto para delinquir.
San Pedrito nos llama a la dicha y al gozo de ser como él, un discípulo, un seguidor y un misionero de la buena noticia de Jesús.
Mons. Ángel Francisco Simón Piorno