Chimbote en Línea.- Los últimos cuatro presuntos integrantes de la organización "Los truchas del valle", quienes desde el año 2014 se habrían dedicado al sicariato, extorsión, robo agravado y 'chalequeo' en el Valle de Nepeña y sus anexos en la jurisdicción de la provincia del Santa, recibieron una orden de prisión preventiva por un espacio de 20 meses, luego que el juez del Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Superior de Justicia del Santa amparara el pedido formulado por la Fiscalía por el delito de asociación ilícita para delinquir.

Se trata de Julio Elkin Vergaray Santos (23) conocido como 'Elkin', quien tendría la función de sicario, Luis Edmundo Mendoza Carrasco (31) conocido como 'Águila' y Arturo Boller Curay Echenique (26) conocido como 'Boller´, quienes se encargarían de los robos, además de Jaime Segundo Carrasco Méndez (37) conocido como 'Pípa' quien sería un extorsionador, quienes se encuentran prófugos de la justicia, tras no ser ubicados durante el megaoperativo en 29 inmuebles de diversos puntos de la ciudad y en el que participaron más de 30 fiscales y 400 efectivos policiales.

Los hechos imputados por la Fiscalía contra el Crimen Organizado datan del año 2014, época en la que aprovechando el auge del sector turismo y agro exportación, además de la ejecución de obras públicas, los integrantes de la organización criminal se dedicaban a la extorsión, 'chalequeo', robo agravado, sicariato, entre otros delitos, para lo cual instalaban en centros comerciales, tiendas, paraderos y vehículos el logotipo de 'la trucha', teniendo entre sus potenciales víctimas autoridades políticas, empresarios, comerciantes y hasta agricultores de los valles de San Jacinto, Nepeña y Moro, cuyos movimientos fueron revelados a través observación, vigilancia y seguimiento.

Víctor Cárdenas o 'Cachete' sería el cabecilla de la organización criminal el cual agenciándose de extorsionadores, ladrones y hasta transportistas empleaba vehículos, celulares, armas de fuego, explosivos y pasamontañas, distinguiéndose de las demás organizaciones criminales con un sticker que revelaba el pago de cupos a su organización criminal, utilizando como 'bunker' una vivienda del Pasaje 2 de mayo en el PP.JJ. La Balanza de Chimbote, a fin de establecer sus reuniones y transitar a bordo de un auto Yaris color negro.
Además la investigación revelaría que al existir dos sectores en pugna tanto en San Jacinto como en Moro, los integrantes de la organización criminal habrían victimado a sus rivales y habrían desechado el uso de stickers de identificación al conocer que sus pasos eran seguidos por la Policía Nacional. Sin embargo utilizaban el vehículo de un comerciante de paltas, quien llevaba dibujado el logotipo de la banda en la parte posterior de su unidad.

Estos elementos fueron expuestos ante el juez Jorge Chávez Tamariz a cargo del Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria con adición a procesos de criminalidad organizada, quien evaluó la situación jurídica de los imputados, emitiéndose los boletines de inmediata ubicación, captura e internamiento en el centro penitenciario Cambio Puente.