Chimbote en Línea (Periodismo escolar) El incendio ocurrido en Larcomar nos recuerda una realidad muy dura paro cierta: la falta de conciencia de prevención contra incendios. Nosotros conocemos muy bien la gravedad de las consecuencias que tienen los desastres naturales, pero debemos reconocer que son peores las de los desastres causados por el hombre.

No debemos pensar que solo los grandes establecimientos deben ser los únicos que deben de contar con las medidas de seguridad necesarias, en realidad, toda tienda y comercio por más pequeño que sea debería contar con los equipos de prevención contra incendios.

Muchas veces los vendedores en su esfuerzo por vender la mayor cantidad de productos exponen a sus negocios, a los compradores y a sus propias vidas a sufrir de las fatales consecuencias de un incendio.

Más aun en estas épocas vísperas de Navidad muchos negocios ofrecen a la venta luces navideñas pero lo hacen conectando clandestinamente los enchufes de estos, utilizando extensiones y sobrecargando los tomacorrientes pudiendo provocar en algún momento un sobrecalentamiento de las conexiones y desatando un incendio.

El extintor, elemento básico para la prevención de incendios, es también el que se encuentra menos presente en los diversos establecimientos, o si esta, no se ubica en el lugar más apropiado o esta tan oculto que en el momento de una tragedia seria inservible.

Pero lo más lamentable es la falta de conciencia de muchos vendedores que anteponen sus ganancias económicas a la conservación de su propia vida. Y a pesar de que en los medios de comunicación se difunden las noticias de múltiples incendios no hay ese cambio de mentalidad en esas personas.

Como siempre hay que esperar que nos suceda una tragedia a nosotros para recién actuar, lamentarnos y tomar conciencia de la importancia de prevenir.

Tampoco se trata de esperar que Defensa Civil llegue a nuestros establecimientos a verificar que todo esté en orden y mucho menos poner trabas para que las autoridades cumplan con su trabajo, sino que es una obligación legal y moral el prevenir y tomar la iniciativa nosotros mismos.

ALUMNO:  MARIO PEDREROS CARBONEL
GRADO: QUINTO
I.E.: SAN JACINTO
DOCENTE TUTOR: ALBERTO MALABRIGO FLORES