Comentar

Opinión: ¿Para qué estudiar? (Tercera parte)

Chimbote en Línea.- Podemos sacar varias conclusiones de mis dos artículos anteriores (con igual título que este), pero al final del segundo dejé la expresión “esta es la causa de que aún seamos un país subdesarrollado”, yo afirmo esto porque, pongámonos a pensar (esto es algo que sus padres quizá alguna ves se lo hayan manifestado): ¿Por qué estudiar, por ejemplo ingeniería electrónica si no voy a conseguir un trabajo adecuado a mi profesión en mi ciudad o en mi país? Por eso vemos luego a muchos (y buenos) profesionales desperdiciando su vida conduciendo taxi, o vendiendo pollo, y surge de nuevo la pregunta ¿Para qué me sirve estudiar entonces?

Recordemos (y convenzámonos de una vez) de que la sociedad se mueve con el dinero, no aprendiendo cómo funcionan las neuronas, y como relaté en mi experiencia en el artículo pasado, mis profesores también son obligados a enseñar esa educación, esas cosas que no sirven de nada, pues son vigilados desde arriba (me refiero a nuestras autoridades) estas grandes esferas demandan que se cumpla esta educación y el resultado es la que dije al final de mi segundo artículo, ellos son los culpables, sean conscientes o no.

En el colegio somos obligados a aprender cosas que no queremos, nos desaprueban si no estudiamos, nos desprestigian, y nuestros profesores con el dolor en su corazón, tienen que ponernos “00”. Luego salimos del colegio, hasta ahí ningún efecto ni razón para no estudiar, ingresamos, con suerte a una universidad, estudiamos 5 años la carrera que más nos agrada. Recibimos nuestro anhelado “cartón” o “titulo” y luego salimos a la calle:

Como si los trabajos y ofertas de empleo cayeran del cielo, bien, vamos a relatarle a alguna empresa, la segunda guerra mundial para que nos contrate, parece muy difícil, incluso en nuestros sueños, el resultado: nos botan, y no le vamos a enseñar nuestro 20 en Historia como justificación.

Y mientras nos conformamos con hacer limpieza pública para tener un sueldo, nuestros excompañeros, esos a quienes nunca les gustó estudiar, ya tienen su negocio de abarrotes ganando en muchos casos más que nosotros, que contradictorio ¿verdad? Pero así es la vida, no como la pinta muchas veces el Estado, nuestros padres o profesores.

La verdad es que el problema no es estudiar ¿cómo?, si en tres artículos he repetido ¿Por qué estudiar? El problema está en la forma de educación en el Perú, que muchas veces no se aplica a la realidad, pero esto nosotros los estudiantes de hoy debemos cambiar.
Continuará (Cuarta y última parte de esta serie)…

ALUMNO: MARIO PEDREROS CARBONEL
GRADO: CUARTO
I.E. : SAN JACINTO
PROFESOR ASESOR: ALBERTO MALABRIGO FLORES