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Hermanas Franciscanas cumplieron 25 años en Chimbote

Chimbote en Línea.- La Congregación de las Hermanas Franciscanas del Sagrado Corazón de Jesús, puede considerarse realmente un regalo de la Divina Providencia; que para su presencia se sirvió de personas, uno de ellos Mons. Luis Bambaren Gastelumendi, quien solicitó a la Congregación con sede en Alemania, fundar una comunidad en este puerto de Chimbote.

Otros, usados por Dios, fueron los niños, niñas y jóvenes con necesidades educativas especiales que en coordinación con Fe y Alegría del Perú, se les solicitaba hacerse cargo de la dirección del Centro de Educación Especial Fe y Alegría N° 42. Así inspiradas en la mística de la Orden de San Francisco en su opción por los pobres, llegaron en abril de 1990 con entusiasmo, alegría y esperanza, tres religiosas misioneras: Damiana Sermershein Eckstein (superiora), Cristina Bécar Mora y Judith Labrín Candia, fallecida el 24 de abril de 2014.

La Congregación fue fundada en Alemania por el sacerdote diocesano Guillermo Berger en el año 1866, las primeras misioneras fueron enviadas a Chile en el año 1936 y al Perú llegaron en el año 1990.

Celebramos en este año las Bodas de Plata, 25 años de entrega a la educación de los niños, niñas y jóvenes con discapacidad física, intelectual, visual, auditivo y multidiscapacidad; quienes reciben la atención y preparación para ser útiles en la vida a través de la inclusión familiar, laboral y social; de esa manera contribuir al crecimiento y fortalecimiento de una sociedad inclusiva; así mismo realizan labor  pastoral en la parroquia Santa Teresa de Ávila.

Hasta el momento Fe y Alegría N° 42 ha tenido como directoras a las hermanas Cristina Bécar Mora (1990), Daniela Lancapichum Pineda (1996) y actualmente a Francesca Lagos Azócar (2004). Hay una población escolar de 180 estudiantes, cuenta con dos anexos en San Jacinto y Coishco, laboran allí 72 educadores entre personal docente, auxiliares, administrativos y de servicio. Se tiene al grupo de Damas Voluntarias que prestan su tiempo y esfuerzo desinteresado a los niños especiales, a las autoridades y comunidad de Chimbote que ve en este gran grupo humano un medio para expresar y compartir su solidaridad. A todos ellos nuestro profundo agradecimiento.

Hacemos extensiva ésta celebración aunándonos con nuestras oraciones e invitando a participar de las diferentes actividades que se desarrollaran en el marco de la beatificación de nuestros tres sacerdotes mártires de la Diócesis. Nos encomendamos en sus oraciones para que Dios y María Santísima lleven a buen puerto esta obra en bien de los niños, niñas y jóvenes especiales de Chimbote. (Publicado en Mar Adentro, mayo 2015)