(Por: Segundo Sánchez) Hablar de la canción A Chimbote es referirnos a la historia de nuestro querido puerto. Nunca una composición ha calado tan hondo en los corazones de los chimbotanos como esta canción, considerada por muchos –entre los que me incluyo- no sólo como la canción más popular de Chimbote, sino como un himno a nuestra ciudad. Y no nos equivocamos al afirmar esto porque pocos chimbotanos, así con la crudeza expresada, saben la letra del Himno de Chimbote, pero la mayoría se conoce de memoria la letra de esta canción.

Hablar de A Chimbote también significa, necesariamente, referirnos a su compositor, el músico y profesor Daniel Cortéz Belupú, trompetista y director de los inolvidables e históricos Rumbaney’s de Chimbote; así como a la musa que le inspiró componer la canción: José Gálvez FBC, denominado el equipo del pueblo. Para ello, primero tenemos que viajar por el túnel del tiempo y remontarnos al año 1971 y recordar dos fechas históricas que influenciaron en la composición de esta canción.

La primera fue el 13 de abril, cuando José Gálvez enfrentó al Alfonso Ugarte, los famosos Diablos Rojos de Chiclín, en un encuentro definitorio para llegar a la final de la Copa Perú en Lima. Antes, en el encuentro de ida, jugado en el Mansiche de Trujillo, José Gálvez derrotó a los chiclinenses por un gol a cero, así que para el partido de revancha sólo bastaba un empate y Chimbote estaría representado en la final de la Copa Perú.

Aquella tarde, en el viejo estadio del Vivero Forestal, el gran Lolito Paredes con un zapatazo desde un poco más del mediocampo venció la valla del gran “Cheva” Mantilla y enmudeció a la hinchada galvista, forzando un tercer encuentro para definir quién llegaba a la final de la Copa Perú.

El encuentro definitorio se realizó en el estadio Lolo Fernández de Lima el 13 de abril de 1971, donde José Gálvez parecía local porque las graderías del recinto de Odriozola estaban abarrotadas de hinchas galvistas, no sólo de los que habían viajado de Chimbote sino de la colonia chimbotana residente en la capital.

Luego de un vibrante y ardoroso encuentro, casi al final del partido, con gol de Alejandro “Casareto” Luces, José Gálvez derrotó a Los Diablos Rojos de Chiclín y se clasificó a la gran final de la Copa Perú para la algarabía de los chimbotanos.

 
Mi  gran amigo Eduardo Quevedo Serrano, chimbotano residente en los Estados Unidos, en su blog http://josegalvezfbc-chimboteperu.blogspot.com/ escribe lo siguiente: “… Entre los miles de chimbotanos hubo un grupo de seis músicos que celebraban la victoria.

Eran Los Rumbaney’s. En el momento que “Casareto” Luces marca el gol y los hinchas galvistas empiezan la celebración, el director  de Los Rumbaney’s, don Daniel Cortéz Belupú, embargado por la emoción recoge del suelo un pedazo de papel e inmortalizó su inspiración escribiendo la canción A Chimbote”.

 
La segunda fecha histórica fue el 08 de mayo de ese mismo año, cuando ya en la final de la Copa Perú realizada en Lima, en el Estadio Nacional, José Gálvez enfrentó a Unión Tumán en el último encuentro. Esa histórica noche José Gálvez ganó por un gol a cero, nuevamente con anotación de Alejandro “Casareto” Luces quedando en tercer lugar y clasificando para jugar el Descentralizado, porque ese año se dispuso que subieran los tres primeros de la final.

Después de un inicio incierto, en que fue goleado por el Mariano Melgar de Arequipa, José Gálvez conseguía llevar el fútbol profesional a Chimbote.

 Eduardo Quevedo señala "En esta segunda oportunidad, los integrantes de la orquesta Los Rumbaney’s también estuvieron en el estadio. Y esa noche, don Daniel Cortez Belupú  añadió un verso final a la letra de la canción compuesta 25 días atrás.

Esta línea fue: “... José Gálvez es campeón”. Dos días más tarde, el lunes 10 de mayo, Los Rumbaney’s  todavía se encontraban en Lima, y se dirigieron a las oficinas del sello discográfico  Infopesa para hablar con su propietario, don Alberto Maraví Chombo. La idea era grabar un disco de 45 rpm y tenerlo listo para el miércoles 12 de mayo, cuando el pueblo y las autoridades de Chimbote recibirían triunfalmente al José Gálvez en la Plaza de Armas de Chimbote”.

 Inicialmente, Alberto Maraví no aceptó la propuesta, pero ante la insistencia de los integrantes de Los Rumbaney's decidió grabar el disco con la condición de que se le asegurase la compra de 500 ejemplares, lo cual fue aceptado.

Sin embargo, el tema no fue cantado por el maestro Lucho Oliva debido a la dificultad que tenía para pronunciar la palabra fútbol con f, sino que lo hacía con jota, por lo que se decidió que fuera el gran Erasmo “Chalo” Gonzáles, tumbador del grupo, quien cante la canción más importante de Chimbote.

 El resto ya es historia conocida. El miércoles 12 de mayo de 1971, en una ceremonia pública realizada en la Plaza de Armas, Chimbote le rindió un merecido homenaje a sus hijos predilectos. Artistas chimbotanos, grupos musicales, fuegos artificiales y, obviamente, Los Rumaney's se hicieron presentes. Chimbote vivía una fiesta. Ese día fue histórico no sólo por el homenaje al club del pueblo, sino porque Los Rumbaney's interpretaron por primera vez en público el tema A Chimbote.